A pesar de que los  ayuntamientos apenas tienen competencias en la materia educativa el equipo de gobierno de Casares realiza un gran esfuerzo por la educación pública que le hace destacar en el ranking publicado por el periódico El País.

El gasto en educación del Ayuntamiento de Casares, que destina una media de 548€ por alumno entre 0 y 24 años,  es de los mayores de España según la comparativa que publica este diario. Situándose como segundo municipio de la provincia de Málaga  y el quinto a nivel Andaluz en gasto medio por alumno.

La Concejalía de Educación de Casares pone en marcha cada año diferentes convocatorias de ayudas educativas  como la gratuidad de libros para el ciclo de infantil, que incluye los uniformes y el método para el alumnado de las guarderías, las subvención del 50% de la cuota de las guarderías municipales,  las ayudas para el transporte a centros públicos que no están cubiertos por la Consejería de Educación, las becas formativas de verano para estudiantes universitarios,  o las becas de idiomas en el extranjero. A lo que hay que sumar las ayudas para la adquisición de libros para alumnos y alumnas de bachillerato, ciclos formativos y universidades públicas, que el sistema público de la Junta de Andalucía no cubre.

Además, el consistorio viene asumiendo desde hace años varios servicios para facilitar la conciliación de las familias casareñas, como los campamentos urbanos durante las vacaciones escolares, el servicio de autobús para los alumnos y alumnas que de Casares Costa que usan el comedor escolar del colegio Blas Infante, el transporte para el alumnado del primer ciclo de ESO que reside en diseminados rurales, y el traslado diario a centros educativos con necesidades especiales que se encuentran en otras localidades vecinas.

Cada curso se pone en marcha desde el Consistorio  un amplio abanico de programas y servicios educativos para que  los escolares del municipio para que tomen contacto con la realidad de su municipio.

El Ayuntamiento también ofrecer otros servicios novedosos como el cambio de mudas para el ciclo de infantil, del aula matinal, aula vespertina y de la vigilancia en los colegios por las tardes.

A esto hay que añadir el plan especial de limpieza y desinfección, y la puesta a punto de los centros escolares para que se pudieran llevar a cabo con normalidad los planes de contingencia COVID, del cual muchas  medidas prevalecen todavía.