El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha licitado por 25,67 millones de euros (IVA incluido) un contrato para la conservación y explotación de 163 km de carreteras del Estado en la provincia de Málaga. El anuncio correspondiente se publica en el Boletín Oficial del Estado (BOE)

La duración es de 3 años, con posibilidad de prórroga de 2 años y otra adicional de un máximo de 9 meses.

Este contrato incluye requisitos para promover la eficiencia energética y la reducción de emisiones y se enmarca en el programa de este Ministerio para mantener las condiciones de circulación, vialidad y seguridad en la Red de Carreteras del Estado (RCE), asegurando que sea accesible en las condiciones adecuadas a todos los ciudadanos.

El contrato está destinado al mantenimiento y conservación de 163,343 km de carreteras del sector nº2, incluyendo 147,285 km de autovía y varios tramos de las siguientes carreteras:

–          Autovía A-45 desde su límite con Córdoba en el kilómetro 81,28 hasta el kilómetro 142,58 ya en la ciudad de Málaga, atravesando los municipios de Antequera y Casabermeja.

–          Autovía A-7 desde el kilómetro 922,52, en la provincia de Granada, hasta el kilómetro 983,7, en Málaga. Este trayecto recorre los municipios de Almuñécar, Nerja, Frigiliana, Torrox, Vélez-Málaga, Algarrobo, Rincón de la Victoria y la propia Málaga.

–          Varios tramos de las carreteras N-331 y N-340 en la provincia de Málaga.

Junto a las carreteras relacionadas, será objeto del contrato la ejecución de la obra de rehabilitación de firme entre los kilómetros 953 (Torre del Mar) y 978 (Barrio Miraflores del Palo en Málaga), de la autovía A-7.

Reducir emisiones

Dentro de la estrategia de reducción de emisiones y mejora de la eficiencia energética, los pliegos de licitación de los contratos de conservación y explotación (COEX) de la Red de Carreteras del Estado incluyen objetivos de mitigación y compensación de la huella de carbono, lo que implica que las empresas deberán incluir en sus ofertas el cálculo de la huella de carbono que generarán durante la ejecución del contrato en cada tramo de la carretera.

En 2022 se incorporaron medidas de eficiencia energética en las instalaciones de servicio tales como el autoconsumo, sistemas renovables de calefacción, medidas de ahorro energético en la iluminación o la implantación de vehículos automóviles eléctricos.

Además, desde 2023, se incluye como criterio de valoración su compromiso a presentar, durante los seis primeros meses del contrato, un plan de descarbonización con el propósito de alcanzar del balance neutro de carbono a los 5 años desde el inicio del contrato.

De este modo, la empresa adjudicataria se compromete a presentar dicho plan, en el que, la compensación se podrá realizar a través de los proyectos de absorción registrados en el registro de huella de carbono, compensación y proyectos de absorción de dióxido de carbono dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico o bien, mediante otras opciones.

Con ello, se persigue la reducción de 71.640 toneladas de CO2 anuales que, según los cálculos realizados por la Dirección General de Carreteras, genera el funcionamiento ordinario y las labores de mantenimiento y explotación de la Red de Carreteras del Estado y se refuerza la orientación hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) con los que está comprometido este Ministerio: 9 (promoción de infraestructuras fiables, sostenibles y de calidad); 11 (acceso a sistemas de transporte seguros, accesibles y sostenibles); 8 (contribución al crecimiento económico y el empleo) y 7 (eficiencia energética).

Características del modelo de conservación

El modelo de contratos mixtos (servicios y obra) para la ejecución de operaciones de conservación y explotación persigue ofrecer un servicio integral de movilidad al usuario, mejorar el estado de la carretera y red, y optimizar los recursos públicos.

A través de ellos se realizan trabajos de ayuda a la vialidad y conservación ordinaria de las carreteras, para permitir que la infraestructura y sus elementos funcionales dispongan de las mejores condiciones de circulación y seguridad posibles. Se incluyen actuaciones como: agenda de información de estado y programación, ayuda a explotación y estudios de seguridad vial, y mantenimiento de los elementos de la carretera con adecuados niveles de calidad.